La empresa Besser 2.0 publicó una presentación en tres partes en la que explica el gerenciamiento de conocimiento a partir de las nuevas posibilidades de la web en relación al software social. Me recuerda la frase que se escuchaba hace unos diez años atrás «hay que estar en internet» pero sin idea de para qué, de porqué o qué decir. Como que es necesario tener un taladro neumático. Es una herramienta muy útil (si se tiene la capacidad para usarla).
La presentación es muy clara y concisa, y explica de manera didáctica porqué no basta con utilizar una herramienta «social» para poder transmitir conocimiento y conectar a las personas. La motivación y los intereses son lo que nos llevan a usar las herramientas para comunicarnos (o hacer cualquier actividad).
«Una revolución del conocimiento» en tres partes
Según Simone Happ (de Besser 2.0), en el pasado la mayoría de los proyectos sobre gerenciamiento del conocimiento no tenían éxito, inclusive se habla de que el gerenciamiento del conocimiento esta acabado. Pero el suceso del software social trae cierta esperanza para reflotar el tema y traerlo nuevamente a la agenda de las empresas. Muchas veces las nuevas herramientas son entendidas desde conceptos viejos, y esta es la estrategia que no funciona.
- se define el conocimiento como un bien transferible desde un lugar central
- se solicita que se comparta el conocimiento sin proveer una audiencia
- se quiere gerenciar el conocmiento
Si bien a las personas les gusta compartir conocimientos, sin una audiencia receptiva no hay motivación para comunicar e intercambiar conocimiento, además de no saber cómo ese material incide en otras personas. No hay entusiasmo por generar contenido sin una razón valedera.
Hay una creencia que a partir del uso de software social el gerenciamiento de conocimiento será exitoso aplicado a contextos sociales específicos. Funciona bien en la web porque es una cuestión de volumen: el 1% de los usuarios genera la mayoría del contenido, el 9% de los usuarios comenta y clasifica información, y el 90% sólo la consume. En una empresa, por ejemplo, cuánta gente representa ese 1%?
Por otro lado, no se trata de leer los mejores documentos sino de encontrar interlocutores válidos. El software social nos permite la creación de un nuevo tipo de redes transparentes y usando sus beneficios en el trabajo diario ayuda a que la gente se encuentre y colabore.
Las personas están conectadas hoy en día y comparten conocimientos mediante el uso de blogs, foros, wikis, RSS, twitter, etc. Se mantienen informadas y deciden qué es importante para cada uno. El software social aplicado a un grupo de trabajo mejora la comunicación entre equipos, permite hacer más transparente los progresos, baja la cantidad de e-mail y de reuniones y –en consecuencia– los proyectos son más eficientes. Las huellas que, al utilizar este tipo de herramientas, vamos dejando, se hacen transparentes y además se van conectando, y al conectarse los temas nos conectamos también las personas (detras de los mismos). Cada una de estas herramientas (blogs, wikis, RSS, twitts, etc) tiene sus propias características y la combinación de las mismas es la que aumenta el potencial.
Creando un contexto de trabajo adecuado las personas indicadas se encuentran. La implementación del softare social en un contexto determinado requiere de ciertas condiciones sociales, tecnológicas y organizativas. La pregunta hoy no es qué información hay que hacer pública sino qué información tiene que estar protegida.
Beser 2.0 propone cómo implementarlo en las empresas con Entrerprise 2.0, que es una extensión de la Web 2.0. La propuesta es crear una cultura: que reine la apertura donde es posible y las reglas donde se hace necesario. Cierran su presentación con una frase (con la que coincido plenamente) del profesor Ikujiro Nonaka, autor del libro The Knowledge-Creating Company (entre otros).
En una economía donde la certidumbre es incertidumbre, la única fuente segura de ventaja competitiva y duradera es el conocimiento.